Reseña: La madre de Frankenstein

La madre de Frankenstein, de Almudena Grandes, tiene tres claros protagonistas: Aurora Rodríguez Carballeira, madre y asesina de su hija Hildegart Rodríguez; su psiquiatra, Germán Velázquez, y María Castejón, la auxiliar que ha mantenido desde niña un estrecho contacto con doña Aurora. Partiendo de unos hechos reales, un parricidio que conmocionó a la sociedad española de 1933, Almudena Grandes teje una historia en torno a unos personajes sólidos y bien construidos que nos llevan por la España franquista.

Grandes sitúa el centro de la acción en el manicomio de mujeres de Ciempozuelos, donde Aurora Rodríguez está recluida, y a la par que narra las vicisitudes de la vida profesional y privada de los personajes, nos describe cómo es la sociedad de la época, en la que la mayoría de ciudadanos viven humillados, y a fuerza de pasar privaciones y miedo, se han resignado con impotencia al futuro impuesto por las clases dirigentes y el clero.

Germán Velázquez es hijo de un prestigioso psiquiatra republicano que debe exiliarse a Suiza para evitar las seguras represalias tras la caída de la República. Allí estudia la carrera tutelado por un judío amigo de su padre, a finales de 1953 decide regresar a España para poner en marcha un tratamiento experimental con clorpromazina, un fármaco que alivia los síntomas de la esquizofrenia. El choque cultural que sufre Germán, educado en un clima de progreso y libertad de pensamiento, es importante y marcará sus decisiones

María Castejón es auxiliar de enfermería en el psiquiátrico, allí ha nacido y vivido la mayor parte de su vida, pues es la nieta del jardinero de la institución y pupila de doña Aurora. Ella representa al prototipo de mujer española, cuyo destino desde la cuna es ser buena esposa y excelente madre.

Almudena Grandes realiza un magnífico retrato de la vida en España bajo la dictadura de Franco, con unas gentes amedrentadas, acostumbradas a su sino, constreñidas por la religión y las pautas impuestas, sin derechos. Un pueblo que solo desea vivir y, en ese empeño, cada uno esquiva la miseria como puede.

Gracias a una rigurosa documentación sobre ambientes y personajes, la autora consigue dotar de una enorme veracidad a una ficción que engancha, que fluye con enorme intensidad y que nos lleva al desenlace deseado que cierra esta apasionante historia.

*Reseña: María Dubón