Este libro se estructura en capítulos de narración cerrada
pero conectados entre sí por la permanencia en cada uno de ellos de los
personajes principales. A través de los mismos la autora hace una reflexión de
los hechos y luego narra las diferentes experiencias de la infancia que la
protagonista evoca desde una perspectiva adulta, cuando regresa a la casa donde
transcurrió su niñez.
Es el primero de una trilogía y nos introduce en el universo
familiar y social de una adolescente, Ángela, de su búsqueda de identidad.El hallazgo de una carta le hace aflorar recuerdos que tenía olvidados y a través de su lectura aparecen las experiencias de relaciones sorprendentes, algunas poco gratas, pero todas llenas de un sentimiento profundo que le marcará para el resto de su vida.
Transcurre en los años de la transición española y la autora refleja con habilidad el ambiente de miedo ante el futuro dudoso que se avecina, después de haber vivido una dictadura de 40 años, la soledad de los personajes como Alejo y la misma Ángela, la relación tan especial que la protagonista mantiene con él y cómo se ve atrapada en la misma creándole una necesidad de estar con él, de verlo, escucharlo, charlar. Alejo es su tío, el aventurero, que ha vivido en París, que se comporta de forma diferente y es admirado y respetado en su pueblo. Ángela lo adora y su alejamiento le produce en muchas ocasiones, verdadero sufrimiento.
En su casa viven cuatro mujeres solas, porque su padre huyó al extranjero. El silencio, el miedo muy común entonces de su otra tía, el trabajo incierto de la madre, su hermana mayor que huye a la ciudad buscando la libertad que parece empezar a aflorar, pero donde todavía persiste la represión… Los personajes se encuentran atrapados en circunstancias difíciles, que obligan a callar dudas, recelos, conflictos y secretos, como el del tío Alejo, figura principal de la trama, que desemboca en un final sorprendente e inesperado.
Hacemos una valoración del personaje de Constanza, violada y rechazada por la sociedad por dedicarse a la prostitución, para poder subsistir.
La autora refleja los convencionalismo sociales, del por qué la protagonista no se atreve a preguntar dudas que le acechan ante comportamientos extraños de las personas más cercanas. Su adolescencia está llena de incertidumbre y la soledad es un punto negro del que no puede escapar fácilmente.
Hay una frase que destacamos “El vivir cerca de alguien no impide que este se convierta en un extraño”. Algo que ocurre en la realidad y en el libro.
En conjunto todas coincidimos en señalar que la lectura del mismo nos ha sido muy gratificante, su tono intimista, la capacidad de transmitir con intensidad las emociones de los protagonistas, los sentimientos… Y cómo a través de las descripciones minuciosas, la autora intenta reflejar una página decisiva de nuestra historia, que no se puede ver con imágenes a través de un libro, pero que ella la transmite con gran habilidad, con esas descripciones tan necesarias en un relato para poder transportar al lector a la dimensión temporal en la que la trama se desarrolla.
Fuegos Secretos, de Pilar Laura Mateo.
Editorial: Mira editores Año: 2008
Páginas: 338